La Unión Ciclista Internacional (UCI) realizó 712 controles durante las 15 primeras etapas del Tour de Francia en el marco de un programa de detección de fraudes tecnológicos. La UCI anunció el lunes que no se encontró ninguna infracción del reglamento.
Un comunicado de la UCI indicó que se realizaron 593 pruebas con pastillas magnéticas al inicio de las etapas y 119 pruebas con rayos X al final.
Las pruebas se llevarán a cabo «al final de cada día en las bicicletas del ganador de la etapa, de los corredores que lleven los diferentes maillots de líder, de tres o cuatro corredores elegidos al azar» y de los corredores que parezcan sospechosos por un motivo concreto, según la federación internacional.
Michael Rogers, responsable de Carretera e Innovación de la UCI, también dijo que los controles «se llevarán a cabo durante las últimas seis etapas al mismo ritmo que en las dos primeras semanas del Tour de Francia».